Nos explican que los despachos de cobranza no descansaron en 2020, con todo y pandemia. De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros (Condusef), que dirige Óscar Rosado, al cierre del año pasado se registraron 27 mil 772 quejas contra esas firmas y el principal reclamo fue que se cobró a la gente sin que tuviera deudas con algún banco. Nos dicen que los despachos de cobranza también mantuvieron amenazas, a pesar de que es una práctica prohibida por ley. Considerando la complicada cuesta de enero, la Condusef quiere reforzar la educación financiera, a fin de que no se vean sorprendidas por malas prácticas, y del mal rato de una amenaza de un despacho de cobranza.
FUENTE: EL UNIVERSAL